Cristina Contero Garrido
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La profesionalidad brilla por su ausencia. Llegamos al piso con la intención de pasar un mes de vacaciones y descanso. La cisterna del único baño no funcionaba. Llamamos y se nos dice que es sábado y que hasta el lunes no se puede dar aviso. Protestamos pero ni caso. Falta absoluta de menaje. Una sola taza de desayuno, por ejemplo, para tres personas. La cocina era de inducción y alguno de los escasos utensilios no era apto La lavadora tenía vida propia, la puerta hacia mal contacto y funcionaba según tenía el día. El fluorescente de la cocina, en las últimas, tardaba mínimo un cuarto de hora en encenderse. De todo esto dimos cuenta puntual al "profesional" de la inmobiliaria y solo recibimos largas y malos modos. Unas vacaciones de ensueño gracias a la ineptitud y negligencia de la inmobiliaria Vera. Gracias.
